Seguro que entre los recuerdos de muchos está “La Estación ”, aquella vieja y olvidada estación de tren. Todos la hemos conocido en su decadencia, en su triste abandono por alguna decisión que no acierto a comprender. Fue inaugurada en 1884 como ramal de la línea Alicante-Murcia, y nos conducía desde Albatera, junto a unos manantiales y un maldito campo de concentración, hasta Torrevieja, en busca de la preciada Sal.
Su sendero, pegado a las vías, era un bello paseo, hoy le llamaríamos “Ruta Verde”, por el que transcurrían muchas de nuestras excursiones, de nuestras aventuras, de nuestras infancias...
La recuerdo como mi lugar preferido de merienda, al que me gustaba ir y esperar el paso del tren, no ya de pasajeros, en 1970 pasaron los últimos, pero sí el de la Sal que continuaría hasta 1984.
Para llegar hasta allí nada mejor que meternos por detrás del Teatro, por el camino del Bañet, y continuar hasta encontrar aquél enorme muelle de carga cubierto en ruinas…Una vez, hasta nos atrevimos a robar, de un enorme y oxidado montón, una viga de hierro para intentar vendérsela al “Comino”, dinero fácil, pero al vernos llegar, agotados por el esfuerzo, nos hizo desandar el camino amenazándonos con ir a la cárcel. Pobres críos.
La estación hace años que quedó en el olvido, la construcción de una autopista fue la excusa para acabar con ella, y curiosamente, hace unos meses que también ha desaparecido el inicio del ramal, San Isidro. En nombre del progreso, llámese ahora AVE, nos hemos quedado sin parte de nuestra historia, pero ¿a alguien le importa?
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Cándido Berná, Manolo Rebollo y Manuel Rocamora un día de merienda en Carnavales, fotografiados junto a un tren en |
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Estación de San Isidro. Tuve ocasión de fotografiarla poco antes de ser derribada. |